El camino es menos pronunciado y más fácil de hecho llegamos muy pronto y nos costó mucho menos.
Eso sí es preferible hacerla pronto porque aquí ya no estamos tan altos y se nota más el calor.
Por este camino vamos ascendiendo hasta la parte alta de Castiello de Jaca, un pueblo pirenáico muy bonito.
Fuimos por zonas de picnic y bosquecitos, ya digo mucho más fácil. Al llegar cerca de Jaca, comenzamos a ver cantidad de gentes, tanto en bicis como caminando, que venian en sentido contrario a nuestra marcha.
Allí nos encontramos a un compañero de mi marido que iba en bicicleta y quedamos con él para más tarde en Jaca.
Llegamos a Jaca que bullia de gente y ambientazo en plazas y calles del casco viejo. Los bares a tope, la gente tapeando.
Fuimos hasta el albergue de peregrinos, pero estaba cerrado y hasta las tres no abrian.
Así que nos tomamos unas cervezas con limón y una tapa de langostinos y descansamos.
Luego quedamos con el compañero y nos llevó a un bar en la zona no tan centrica, donde tomamos una cazuela de migas y un plato de cebolla de Fuentes con aceite y un porrón de vino clarete con sidra dulce muy frío, que nos sentó de maravilla.
Luego nos llevo con su coche hasta Villanúa para recoger nuestro coche aparcado e hicimos un picnic en un area con su bosquecito.
Por la tarde bajamos a tomar un café a Jaca y estuvimos en el albergue donde nos sellarón y entablamos una agradable conversaciòn con la señora que estaba allí en el albergue.
Luego finalizamos la jornada marchando para casa.
Iremos haciendo partes del camino todo lo que podamos, poco a poco.
mamarosa
Visitar los pueblos del camino, merece la pena.
Jaca la Ciudadela, en el foso hay ciervos.
Picnic para comer y reponer fuerzas.
La catedral de Jaca una joya
Las pastelerias de Jaca, tienen unos buenos dulces.
Y el museo Diocesano de Jaca con todo sobre el románico.
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