Otro pueblo en lo alto en donde se divisa el río ARA, al fondo del valle Broto
Una subida por una carretera pronunciada, hoy en día asfaltada, años atrás era un desastre, nos conduce hasta este pueblito.
Qué vistas allá arriba!
Una calle principal, nos va mostrando a izquierda y derecha las diferentes casas ,con su encanto particular, antigüedad, un pajar, flores en sus ventanas, o portones con un pequeño jardín en su interior, un pasaje que une dos viviendas...
Allí se encuentra el restaurante asador "El balcón del Pirineo", su dueño muy amable y joven, nos atendió estupendamente.
Degustamos una fuente de boletus con huevo de corral (sabrosísimo), una ensalada ilustrada con piñones, y unos chuletones, de ternera del valle de Broto, muy bien asada a las brasas, los postres también muy ricos.
La anecdota del día:
Se resbaló una copa de vino y como no, a quién tuvo que manchar...??,, pues a mí, por qué??, porque no se me ocurrió otra cosa que ir con una falda blanca inmaculada, que llamaba a gritos una mancha.
Pero no fue una mancha solo, no, fue toda la falda teñida de rojo.
Los dueños enseguida me dijeron de lavarla, me dieron jabón y lejía, y tuve que improvisar un vestuario nuevo.
Menos mal que siempre llevo un gran foulard, que desplegué y me puse a modo de pareo, look perfecto de vestido, y encima una chaqueta que llevaba en el bolso, y pude regresar a casa toda dignamente vestida, con mi falda en agua en un cubo que me dieron.
Hay que improvisar y buscar recursos y soluciones a estos imprevistos,
Pero este incidente no nubló un excelente día .
Portalón y jardín interior
Ventanuco
Vistas
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