De vacaciones por Asturias
¡Qué vacaciones tan maravillosas! Asturias es preciosa tiene
de todo el mar la montaña y todo a muy pocos kilómetros, así que se puede ir
por la mañana a la playa y por la tarde subir a visitar a la Santina en
Covadonga a los lagos a alta montaña.
Fueron unas vacaciones la mar de bucólicas, elegimos un
hotelito rural porque con niños pequeños me gustaban los sitios amplios,
cómodos, con jardín y con espacio para toda la familia. El hotel estaba en un
pueblecito de la zona de Villanueva de Llanes y teníamos un ático abuhardillado
enorme, mi hijo todavía tomaba biberón y papillas de cereales y ya imagináis el
montón de equipaje, cuna plegable, biberones, bolso enorme con pañales, juguetes
y demás parafernalia que ya conocéis las que sois madres.
Cercano al hotel había una vaquería y todos los días teníamos
que pasar a visitar a las vacas porque les encantaba a los niños y no os imagináis
la cara que puso el niño cuando una vaca se meo, vamos una inundación, no parábamos
de reírnos.
Cruzando los praos se iba a la playa de San Antonio una cala
que ahora no sé cómo estará pero antes estábamos solitos la mar de bien en plan
Robinson Crusoe con su cueva y todo.
El paisaje precioso en lo alto había una ermita y
bajabas el acantilado hasta la playa parecía
que de un momento a otro llegarían los bucaneros o los piratas una gozada.
Al principio llegar allí era un poco largo con la sillita
del niño las bolsas de playa … y teníamos que ir por senderos, pero un día al
lado de una cerca un asturiano la mar de amable nos dijo que podíamos pasar por
sus tierras que cruzando llegábamos antes y así lo hicimos desde entonces.
La gente encantadora, la comida inigualable que arroces con
leche, fabes con almejas o con compango, carne, pescados ,oricios, pichin
(rape), cuajada con limón se me está
haciendo la boca agua solo de recordarlo, y las patatas al cabrales y esa sidrina
bien tirada…aggg.
Mi marido llego a casa con 5 kilos de más y yo pues a mí no
me gusta pesarme pero imagino que un par de kilos también, hasta mi hija que
era muy mala comedora se puso morada con un lenguado en una sidrería de Ribadesella.
Y es que por las tardes nos íbamos hasta Ribadesella o Nueva
y allí paseando y visitando cosas y ya hacíamos la cena en cualquier sitio. El
paseo de Ribadesella leyendo los carteles que hablaban de las Xanas y otras
leyendas Astures que le apasionaban a mi hija por que parecía de cuento y el
ambiente tranquilo y animado a la vez .
En Villanueva de LLanes en la playa de las cuevas del Mar, cogiendo
en las rocas cangrejos como nos lo pasábamos de bien, cuando se podía ir hasta allí
luego cuando subía el mar aquello quedaba en medio del mar y es muy bonito.
Otro día cogimos un tren de cercanías para ir a Llanes
porque mi hija no había ido en tren y le hacía ilusión desde el tren se veía
las playas el mar el paisaje, allí hicimos turismo y comimos de maravilla y de
vuelta al hotel.
Hicimos muchas excursiones vimos cuevas de Tito Bustillo,
visitamos el archivo indiano en una casa muy bonita, los pueblos pesqueros de
Cudillero Tazones (cocina marinera),Cangas
de Onis (que fabada y chuletón con
cabrales y …).
Tambien nos acercamos a la zona interior y visitamos el
museo de la minería, y también el muso de la sidra donde nada más entrar nos
daban una manzanita y veíamos el proceso de fabricación de la sidra y hasta podíamos tocar una enorme gaita
Asturiana.
La verdad es que pasamos unos días estupendos de los que no
se olvidan, tanto los paisajes, la gente, la comida, el mar la montaña y las
mini aventuras familiares fue todo
genial.
A la vuelta entramos en Cantabria a visitar Cabárceno y ver
todo el complejo de la antigua mina reconvertida en parque con animales de todo
el mundo que les encantó a los críos de manera especial.
Cantabria ya la conocíamos Santander, Suances, Potes , Santillana, San Vicente de la Barquera y también
las corbatas deUnquera que ricas las
quesadas, sobaos pasiegos, el cocido montañés y el de Liébana.. se nota que
estoy a régimen pero es que lo estoy viendo mientras lo escribo.
Bueno como siempre que España es preciosa y hay que
conocerla y que se come de maravilla un consejo a los niños no les pidáis cuando
vayáis a comer de restaurante siempre la pasta, que se acostumbren a probar de
todo aunque sea en pequeñas cantidades, al final apreciaran la comida y sabrán
distinguir y se acostumbraran a probar de todo, es un latazo los críos que sólo
comen spaguettis y filete.
Mamarosa
Nota. No es que se me olviden sitios que no he nombrado es para no alargarme mucho pero os pongo que
no dejéis de ver los bufones, los acantilados Arriondas
los hórreos , Gijón que me encantó con sus termas la colegiata, la casa
de Jovellanos, palacios sus playas etc.
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